Acércate a mí y observa mis heridas, siénteme y podrás tocar cada trozo de mi corazón roto, mi piel acariciada por agudas palabras
que terminaron de romper mis creencias, que flagelaron mi espíritu y condenaron
a mi mente a realizar un viaje por día al universo que jamás fue, construí mi
hogar sobre tus gritos de agonía ya que morías cada momento que pasabas junto a
mí, te pensé mi salvación dentro de este abismo infernal de apariencias y
sombras donde me encontraba sumergida, abriste las puertas de tu corazón para mí, pero no me querías en el, solo querías destrozarme y jactarte junto a mis
demonios como lograste hacerme explotar en mil pedazos, aun escucho el eco de
la risa que condeno mi vivir y escribió mi destino con amargos tonos grises que
nunca más cambiarían de color.
¿Algún día me regresaras mi mejor versión?.
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