domingo, 16 de febrero de 2020


Nuestras sombras se plasmaron en cada esquina
Donde el tiempo no existía, te di cada rincón de una ciudad muda, te di mi música para que bailara con tus recuerdos, te di mi paciencia para observar y poder guardar cada momento en tus retinas.

Me hiciste tan tuya que deje de ser yo,
me empujaste frente a mis miedos y así 
Miramos el ocaso de nuestra oscuridad desvanecer,
Experimentamos tanto placer al punto de romper en llanto sin sentir temor de mirar un rostro empapado de ilusiones y lágrimas de fantasía, 
sintiendo el dulce roce de una conexión infinita.

prometiste no dejarme caer jamás y aquí estoy recogiendo mis pedazo. 




No hay comentarios.:

Publicar un comentario